La Caso de interferencia de las elecciones federales de Trump es un caso penal contra el ex El presidente estadounidense Donald Trump, quién es acusado de conspirar para anular los resultados de las elecciones presidenciales de 2020 a favor de sí mismo.
El caso fue presentado por un fiscal especial designado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Jack Smith, ex subdirector del FBI.
El caso se basa en evidencia de que Trump y sus asociados presionaron y amenazaron a funcionarios estatales y locales, miembros del Congreso y al vicepresidente Mike Pence para que rechazaran o cambiaran los votos electorales que certificaban Joe Biden como ganador de las elecciones.
El caso también alega que Trump incitó a una turba violenta a asaltar el Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero de 2021, en un intento de detener la certificación de los votos electorales.
El caso está actualmente pendiente en el Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito de Columbia, donde está presidido por la jueza Tanya Chutkan.
Un gran jurado federal acusó a Trump en agosto de 2023 de tres cargos relacionados con sus esfuerzos por anular las elecciones, incluido el intento de obstruir el proceso de votación electoral, impedir los procedimientos del Congreso y conspirar para privar a los estadounidenses de su derecho a votar y a contar esos votos.1.
Trump se ha declarado inocente de todos los cargos y ha afirmado que es inmune al procesamiento porque sus acciones formaban parte de sus deberes presidenciales oficiales.1.
También acusó al fiscal especial de ser parcial y tener motivaciones políticas, y atacó al juez, a los fiscales, a los testigos y al jurado en sus declaraciones públicas y publicaciones en las redes sociales.
El caso ha atraído amplia atención y controversia, ya que involucra cargos sin precedentes contra un expresidente que también se postula para la reelección en 2024.
El caso ha planteado cuestiones legales y constitucionales complejas, como si un expresidente puede ser procesado penalmente por sus actos oficiales, si el discurso de Trump está protegido por la Primera Enmienda y si el tribunal puede garantizar un juicio justo en un caso de tan alto perfil. y caso polarizador.
El caso también ha provocado acalorados debates entre políticos, expertos legales, medios de comunicación y el público en general sobre la legitimidad y las implicaciones del caso para la democracia estadounidense.
La fecha del juicio del caso se ha fijado para el 4 de marzo de 2024.2, que es un día antes del Súper Martes, un día de votación crucial en las primarias presidenciales republicanas.
La fecha del juicio fue decidida por la jueza Chutkan después de que rechazó tanto la solicitud de Trump de un juicio en abril de 2026 como la solicitud del fiscal especial de un juicio en enero de 2024.2.
El juez Chutkan también impuso una orden de silencio limitada a Trump y sus abogados el 18 de octubre de 2023, prohibiéndoles hacer declaraciones que pudieran perjudicar o intimidar a posibles testigos, jurados o personal del tribunal.3.
Sin embargo, levantó temporalmente la orden de silencio el 20 de octubre de 2023, después de que los abogados de Trump la apelaran ante un tribunal superior.4.
Se espera que el caso sea largo y complejo, ya que involucra millones de páginas de documentos, cientos de testigos y docenas de mociones legales.
El resultado del caso podría tener consecuencias significativas para el futuro político y el legado de Trump, así como para el Estado de derecho y la integridad de las elecciones estadounidenses.