Kevin McCarthy anunció el miércoles que renunciará al Congreso a fin de año.
Él era el primer orador en ser derrocado por su propio partido después de una serie de concesiones y conflictos con la facción ultraconservadora del grupo republicano.
Negó los informes de que estaba considerando renunciar antes del final de su mandato, pero luego confirmó su decisión en un artículo de opinión en el Wall Street Journal.
Él dijo planea “servir a Estados Unidos de nuevas maneras” y que su trabajo “apenas comienza”.
McCarthy se convirtió en portavoz en 2015 después de que John Boehner dimitiera en medio de la presión del movimiento Tea Party.
Se enfrentó a la difícil tarea de equilibrar las demandas de los sectores moderado y conservador de su partido, especialmente en cuestiones como la inmigración, la atención sanitaria y el gasto público.
También tuvo que lidiar con el ascenso de Donald Trump, quien a menudo chocó con el establishment republicano y criticó a McCarthy por ser débil e ineficaz.
El mandato de McCarthy como orador estuvo marcado por varias controversias y reveses. En 2016, retiró su respaldo a Trump después de que un video filtrado mostrara al entonces candidato presidencial haciendo comentarios vulgares sobre las mujeres.
Posteriormente revocó su decisión y se convirtió en uno de los aliados leales de Trump en el Congreso. En 2018, no logró impedir que los demócratas tomaran el control de la Cámara en las elecciones de mitad de período, perdiendo 40 escaños y la mayoría. En 2019, enfrentó críticas por su gestión de la investigación de juicio político contra Trump, acusando a los demócratas de llevar a cabo una “caza de brujas” y un “proceso falso”.
En 2020, apoyó las afirmaciones infundadas de Trump sobre fraude electoral y votó a favor de anular los resultados en algunos estados. También se opuso al segundo juicio político contra Trump tras el motín del 6 de enero en el Capitolio, incitado por el expresidente.
La renuncia de McCarthy fue una sorpresa para muchos, ya que se esperaba que volviera a postularse para presidente si los republicanos recuperaban la Cámara en 2024.
Dijo que estaba orgulloso de sus logros como orador, como la aprobación de la Ley de Empleos y Reducción de Impuestos, el fortalecimiento del ejército y la confrontación con China. También dijo que estaba agradecido por el apoyo de sus colegas y electores, y que continuaría luchando por los valores y principios conservadores en los que cree.
No especificó cuáles son sus planes futuros, pero algunos especulan que podría postularse para gobernador de California, unirse a un grupo de expertos o lanzar una empresa mediática.
Algunos de sus aliados y críticos expresaron sus reacciones a su renuncia. El líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Steve Scalise, elogió a McCarthy por su liderazgo y servicio, y dijo que confiaba en que McCarthy seguiría siendo una “voz poderosa” para el Republicanos.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, agradeció a McCarthy por su cooperación en algunos temas, como el paquete de ayuda para el coronavirus y el proyecto de ley de infraestructura, pero también lo criticó por su “abdicación de responsabilidad” sobre el ataque del 6 de enero y la integridad electoral.
El expresidente Trump emitió un comunicado calificando a McCarthy de “desgracia” y “perdedor”, y lo culpó por las derrotas republicanas en 2018 y 2020. También dijo que apoyaría a un “líder real” que reemplace a McCarthy como jefe de la Cámara Republicana.
La renuncia de McCarthy marca el fin de una era para el Partido Republicano, que ha sido dividido y transformado por el fenómeno Trump. También plantea dudas sobre la dirección y estrategia futuras del partido, mientras se prepara para las elecciones de 2024 y los desafíos que plantean la administración Biden y la mayoría demócrata.
El sucesor de McCarthy tendrá que navegar por el complejo y dinámico panorama político e intentar unificar y dinamizar la base republicana, al tiempo que se acerca a los votantes independientes y moderados. Queda por ver quién emergerá como el próximo líder de los republicanos de la Cámara de Representantes y si podrá restaurar la reputación y la credibilidad del partido o continuar siguiendo el camino del trumpismo.
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